Francisco Morazán

Este departamento está ubicado en el corazón de Honduras, con una población de más de un millón de habitantes es el departamento más poblado del país. Dentro de Francisco Morazán se puede identificar cuatro regiones atractivas para cualquier hondureño: Tegucigalpa, la ruta real de minas, el parque nacional La Tigra y Ojojona.

Tegucigalpa

Fundada en 1578, Tegucigalpa es actualmente la capital del país. Es el motor político y financiero del país, contando con muchas opciones para disfrutar, conocer o simplemente relajarse. El clima de la ciudad es fresco durante la mayoría del año, brindando un excelente ambiente a sus habitantes y demás personas que la visitan.

Para los amantes de la historia y de la cultura colonial, en Tegucigalpa se hay diferentes museos y galerías de arte. Por ejemplo, en el centro de la ciudad se encuentran el Museo Nacional de Villaroy, dedicado a la historia republicana del país, el Museo del hombre, el cual cuenta con una extensa galería de arte con obras de artistas hondureños, y el Museo de Identidad Nacional, en el cual se puede explorar todo el pasado de nuestro país.

Si se quiere compartir con la familia, el Parque del Picacho es una excelente opción. Aquí hay múltiples actividades por ejemplo disfrutar de la hermosa vista en el mirador del picacho, y admirar el monumento del Cristo, una obra arquitectónica moderna, que ya representa un icono de la ciudad. También los niños podrán conocer y disfrutar de los animales del zoológico, el cual está ubicado en el mismo parque. Finalmente pueden disfrutar de un picnic familiar, en las muchas áreas verdes ubicadas en el parque.

En la zona viva de la capital se pueden encontrar diferentes discotecas, bares y restaurantes para disfrutar con los amigos y relajarse después de un día de trabajo. Con solamente preguntarle a cualquier capitalino cual es el lugar de moda el turista puede llegar y disfrutar de un ambiente agradable y divertido. También se puede degustar platillos de cualquier región del mundo: comida hondureña, china, italiana, americana y otras.

Ruta real de Minas

Esta ruta turística comienza en la capital Tegucigalpa, y se extiende hacia el noreste de la misma pasando por los municipios de Santa Lucia y Valle de Ángeles y concluyendo en el Parque Nacional “La Tigra”.

Santa Lucia y Valle de Ángeles son dos pequeños pueblos coloniales a pocos kilómetros de la Capital. En ambos se puede encontrar muchas artesanías realizadas por las talentosas manos de sus pobladores, las cuales venden a precios realmente cómodos. Se puede disfrutar de un clima agradable ya que estas poblaciones están rodeadas de pinares, lo que hace de esta zona un lugar espectacular.

Al finalizar la ruta real de Minas se encuentra el Parque Nacional “La Tigra” ubicado a casi una hora de la capital. Con una extensión de 238 km² este parque es el conocido como el pulmón de Tegucigalpa por la cantidad de flora que se encuentra ahí. También en el parque se puede encontrar una enorme diversidad de animales, en su mayoría aves. Se han encontrado más de 200 especies de aves en esta región.

Para los amantes de la aventura, La Tigra ofrece varios senderos a través de los cuales se pueden disfrutar de la vegetación, y si se camina con cuidado, hasta se podría observar las aves en su hábitat natural, o a cualquier mamífero merodeando en los alrededores. En el corazón del parque se encuentra una cascada de agua fresca que provee de agua potable a cierto porcentaje de la población capitalina. También hay un hotel de montaña para los quieran disfrutar de una noche inolvidable.

Ojojona

Un municipio ubicado al sur de la capital, se está convirtiendo en un destino muy visitado por los capitalinos los fines de semana. Este es sin duda uno de los pueblos que todavía se conservan ese atractivo colonial que las grandes ciudades ya están perdiendo. Muchas organizaciones están desarrollando diferentes proyectos para poner en valor lo que Ojojona puede ofrecer. Por ejemplo la fundación amigos de Ojojona, realiza diversas obras para mejorar las condiciones de infraestructura del lugar, y así hacer más amigables las condiciones a los turistas que la visitan.